BTTANDO CON JON!!!!!!!!!! Sorpresa, Sorpresa!!!!!!!!!

          Hoy ha sido un día especial. ¡Ya estamos! pensaréis muchos, siempre cuenta lo mismo. Pues no, hoy ha sido un día especial, pero especial con mayúsculas, así...¡ESPECIAL! 

BTTANDO

           Uno de nuestros compañeros de grupeta llevaba tiempo desaparecido. No intervenía en el grupo de whatsapp, no venía a las salidas. ¿sabéis algo de Jon? Pues parece que anda fastidiado de la pata y tiene que pasar por el quirófano. ¡Mazazo! Pensaba que no andaría en bizi hasta que un día Lopa me sacó de mi error. "Le operan el día tantos... ¿por qué no montamos una y vamos el mayor número de gente posible a dar una vuelta a Sopuerta con él?" me suelta. ¿Pero anda en bizi? Sí, a su ritmo pero sí. Claro, la historia es que sea una sorpresa por lo que hacemos otro grupo de whatsapp paralelo pero sin Jon. Y a partir de ahí vamos dando los pasos para preparar la salida de hoy. Hay que reconocer que Lopa tiene ideas brillantes.

          Muchas dudas...andará mucho...andará poco... a ver si en vez de hacerle una gracia le hacemos una putada. Para no dar palos de ciego una pequeña comitiva de BTTANDO queda con él a mediados de diciembre. No se amplía la convocatoria a todo el grupo porque reálmente no se sabe lo que se va a encontrar allí. ¡que cabrón! subir ...vaya, pero bajar...¡como baja! Viendo que es completamente factible la salida-sorpresa con él se abre formalmente la inscripción para el gran día, 10 de enero. Aunque algo confusa ... que si le conozco, que si no le conozco... ( nadie nace sabiendo y lo que importa aquí es la voluntad. Recordemos que en BTTANDO no se excluye a nadie, todo lo contrario. Si alguna vez observáis algún comportamiento que os parezca inadecuado hacédnoslo saber. Todos sabéis a quienes nos podéis comentar este tipo de cosas) la convocatoria es un éxito de participación. Cerca de 20 personas confirman su asistencia, no me cabe ninguna duda de que alguno que ha faltado le ha pillado currando, o de viaje, ... Otros.. no supimos explicarles bien la idea de la salida... en cualquier caso nada más ni nada menos que 14 personas nos hemos juntado hoy con Jon en Sopuerta para pedalear a su lado, no me cabe ninguna duda que muchas más estaban de corazón.

          Lopa, Gipu, Oskar, Iñaki, Ángel, Alex, Iñigo, Isma, Aitor, Iker Carro, David, Julio, Palma y yo somos los integrantes del grupo que vamos al encuentro de Jon. La previsión meteorológica ha contribuido a que haya habido alguna baja de última hora, han dado malísimo. Aunque tanto Gipu como David se esmeran en decir que no, que no va a llover... 

ENLACE AL TRACK

          Exceptuando a David que nos saldrá al encuentro en Gallarta el resto comenzamos a pedalear cuando pasan más de los cinco minutos de cortesía que solemos dar a los más tardones. Manu y sus acompañantes de Baraka nos avisaron anoche de su no asistencia, por lo que el "causante" de la espera de hoy es el "otro" Iker. ¡Vaya día que os habéis perdido!

          Es de noche cerrada y para evitar en su mayor parte el tránsito por carretera decidimos "invadir" la Franco-Belga y por la rampa de Urioste acceder a la tranquilidad que da el pedalear por el bidegorri. Grupo grande y rodar tranquilo. Como suele ser habitual al comienzo de las rutas me veo en cabeza intentando poner un amigable ritmo al gusto de todos. Muchas caras nuevas, ¿nuevas?, mejor dicho no habituales. Es una auténtica gozada ver a nuestro lado a Álex, que desapareció hace demasiado tiempo de nuestras salidas; a Aitor, que por fín ha dejado su bici de andar tumbado aparcada por un día para salir con nosotros; a Isma, bufff, ni recuerdo cuando fue la última vez que saliste con nosotros, ¿quizás Gorbeia?; a Iker, que le toca meter ahora más horas con otro manillar entre las manos; a Iñigo, que una lesión le ha tenido a un lado durante un tiempo y parece que vuelve por sus fueros; ... Es una auténtica gozada ver en el grupo a tanto "ilustre" de BTTANDO.

Hace un rato ya que ha amanecido

Aitor dice que él no, que es Isma el que pone el ritmo

          Unos pocos focos aseguran nuestra integridad en estas primeras pedaladas. David sale a nuestro encuentro en Gallarta y despunta ya el día cuando abandonamos la carretera y nos introducimos en lo que propiamente es la Vía Verde, asfaltada todavía. Rodamos fácil. Al menos a mí me lo parece y antes de darme cuenta Oskar se deja caer en el grupo para anunciar a los de atrás que Lopa y Julio han ido por delante según el plan establecido. Mucho tiempo que no pedaleaba por aquí. Desde que empezaron las obras ha desaparecido entre mis posibles itinerarios a la hora de plantear una ruta. Más o menos una hora de pedaleo. Estamos entre los dos túneles antes de llegar a La Aceña, cuando vemos aparecer al fondo a Jon acompañado de Julio y Lopa. Verle la cara en este momento de encuentro compensa con creces cualquier esfuerzo y creo que es el sentir general de todos los allí presentes.

¡¡¡Sorpresa!!!! La cara de Jon no tiene precio

          Claro, uno de los inconvenientes de darle una sorpresa es que, en un instante, Jon debe improvisar un recorrido "para todos los públicos". Sé que no es problema para él. Perfectísimo conocedor de la zona, ya nos lo ha demostrado en varias ocasiones, duda entre un par de alternativas y al final se decide por Ubieta. Perfecto! Por un momento pienso que demasiado lejos (siempre se nos ha hecho tarde cuando hemos pretendido acercarnos hasta él) pero , ¡que más da! Conforme vaya avanzando la ruta el reloj nos irá diciendo las alternativas a seguir, Jon es el guía, no hay problema.

          Los tres recién llegados dan vuelta a sus monturas y continuamos nuestra aproximación a La Aceña. Antes de pasar el último túnel, sorpresa. Ahora nos la da él. Tomamos el sendero que durante mucho tiempo nos vimos obligados a coger por la imposibilidad física de pasar por el último túnel sin bajarse de la bici. La cantidad de zarzas nos da una idea de lo poco frecuentado de su uso. Primer incidente de la jornada, una de las zarzas que ha arrastrado Iñaki, se suelta y va a pegar violentamente contra la cara de Isma que rodaba delante mío. El trallazo es de aúpa pero afortunadamente queda en un susto...y una heridita encima del labio...jejeje

Ahora ya somos 15. Continuamos la ruta

Momento del impacto. Afortunadamente nada grave. Iñaki, Iñaki, ...jajajajajaja

          A consecuencia del incidente se ha producido un parón que ha obligado a los de delante a detenerse para esperarnos, ¡hemos andado 500 metros! y como no puede ser de otra forma ya se oye a Álex hacer sus primeros comentarios sobre el itinerario... "Yo creo que no conoces bien la zona Jon, ¡con lo bien que hubiésemos pasado por el túnel!" le suelta. Claro, las carcajadas se oyen en Galdames. Parece claro que es idea de Jon obsequiarnos con "golosinas" de vez en cuando sin alterar la ruta del grupo. Poco más adelante, cuando ya hemos superado el pequeño arroyo después de pasar bajo la carretera que sube a San Pedro de Galdames, desde lejos veo como Jon se va al suelo. No doy crédito, parece la típica hostia tonta del día. ¡que va! cuatro maderos transversales que dan acceso a una senda que nos lleva a una zona acondicionada como merendero han sido los causantes de la caída. Mojados como están son auténticas pieles de platano bajo nuestros neumáticos. No lo debe ver así él porque poco más abajo de nuevo... ¡hostión! Ahora no son cuatro, son bastantes más, una auténtica temeridad bajar por ahí. Visto lo que le ha pasado al guía el resto opta por la prudencia (los que bajamos, bajamos andando) y la sensatez (el resto se da la vuelta, toma la Vía Verde y sale a nuestro encuentro 50 metros más adelante)

La Aceña. Tiempo sin venir por aquí

Jon se acaba de cascar la primera. Le hemos puesto nervioso, jejeje...

Los "pros" quitan aire cuando bajan. Pero luego no tienen que ponerlo... ¿o sí?

Vamos, vamos, ...

         Toca esperar de nuevo. Oskar ha quitado demasiado aire a su neumático y ahora se ve en la necesidad de meterle presión suficiente para poder seguir andando. Como los "pros" ha quitado presión para descender, pero al parecer se le ha ido la mano, ...jajajajajaja. Solucionado el problema seguimos adelante. Después de pasar el primer puente de madera camino del Arenao, Jon nos conmina a tomar un atajo pelín complicado, lo conoce como la palma de su mano. Palma, Oskar, Lopa, David, Julio y yo (creo que no me dejo a nadie) somos los tarados que intentan el ascenso. Julio, que es el último que lo intenta, hace un mortal invertido hacia atrás con doble pirueta que nos deja sin habla. Comprobada su integridad las risas se oyen desde Murcia. Ingenuo de mi al comenzar el ascenso pensaba que no era optativo, que la ruta pasaba por subir si o sí esa cuesta. El resto mucho más inteligente acompaña a Jon por la variante fácil.

          Al abandonar la Vía Verde de esa forma el objetivo es evitar el paso por el tramo cortado por obras que, por El Castaño, nos llevaría hasta la cantera que se encuentra en la carretera de Artzentales. Esto lo hacemos por asfalto tomando la carretera de Sopuerta que a la altura del cruce hacia Las Muñecas dejaremos para ascender, ya sin contemplaciones a las inmediaciones de la cantera. Subida dura, larga. Hay que tener en cuenta que la Vía va más alta que la carretera. Cuando llegamos a la altura del paso habitual de la cantera (ahora) veo cómo Jon sigue su ascenso para tomar, supongo, el paso antiguo. Demasiado duro para los tres de atrás entre los que me incluyo. Así, le pego un grito a Jon y le digo que le esperamos en la Vía Verde, cuando vuelvan a enlazar un poco más adelante. De esta forma Ález, Isma y yo nos tomaremos un beneficioso respiro.

Aitor. Dura rampa hacia la cantera. Por debajo del nivel de la Vía Verde. Todavía...

Palma, bizi chula lleva, sí señor.

El grueso del pelotón. No estoy llamando gordo a Iñigo, ¡eh!

Dice que sólo le saco cuando va el último. Como véis, no es cierto

Álex. Tranquilidad encima de la bizikleta

Al fondo cogeremos el desvío de la izquierda Isma, Álex y yo. El resto, ... para arriba

       Isma comienza a comentar que quizás se dé la vuelta, demasiados kilómetros en sus patas dice. Lo cierto es que yo no veo factible subir Ubietamendi, estoy seguro de que no lo ascenderemos pero tampoco voy a tomar yo la decisión. Hablan entre ellos a ver como están. Álex dice que Ubieta es demasido para él. Les propongo esperar a Jon y que nos proponga cómo continuar. Hemos decidido pedalear hasta el cruce de la carretera que sube a Alen y allí les estamos esperando cuando Lopa y David llegan extenuados del calentón que se han metido para alcanzarnos. Estoy completamente seguro de que han disfrutado del paso antiguo de la cantera, aunque como decía Iñigo... guapo sí, pero buffffff con las cuestitas...

          Cuando Jon nos cuenta las opciones entre los jaleos de los animadores del grupo casi todos vemos más lógico la opción que contempla acercarnos hasta Traslaviña, subir Bezi, dejarnos caer a Avellaneda y allí volver a valorar otra vez. Siempre existirá la posibilidad de acortar por asfalto hasta Sopuerta en caso de que se nos vaya la hora.

          Aprovechamos el paso por unos antiguos cargaderos de mineral para sacar unos fotos de grupo. Parece mentira que esto haya estado oculto durante años sin poder imaginar siquiera lo que tapaba la vegetación existente en la zona. Seguimos nuestro paso tranquilo hasta llegar a la estación de Traslaviña y nos disponemos a ascender la dura subida a Bezi. Totalmente desconocida para mí preferiría haber seguido en mi más absoluta ignorancia y haber dejado su ascenso para otra ocasión ¡que rampas! Cuando llevamos un poco más de la mitad de la ascensión Iñaki se detiene a meter aire a su bizi. Mala señal. Oskar, Palma, David y yo le esperamos y cuando se vuelve a incorporar al grupo desiste, dice que no, que debe parar, que tiene que arreglar el pinchazo. Oskar se detiene de la misma, Palma y David van por delante mío y yo me ofrezco a avisar a los de delante cual es el motivo del nuevo retraso que va a sufrir el grupo. Lopa y Julio bajan a ayudar y el resto pasamos el rato como podemos. Hemos dejado atrás una cuesta infernal y no estamos por la labor de volver para luego tener que subirla de nuevo. 

Poco más de un kilómetro hasta la Estación de Traslaviña

La subida hormigonada a Bezi

Poco después Iñaki se detendría a reparar el pinchazo. Aún con cuesta por delante

La espera se hace larga. A pesar de los chistes y las bromas

Aunquue a veces sean muy divertidos y los pille sólo Jon

          Larga, larguísima se nos hace la espera. Creo que no exagero si digo que cerca de 20 minutos es lo que debemos esperar hasta que por fin les vemos coronar el alto en el que hemos estado esperandoles. ¡es increible! al menos estamos teniendo suerte con el tiempo. Ni lluvia ni agua. Si nos los hubiesen dicho ayer no nos lo habríamos creído. Sí David, Sí Javi, ya sabemos que vosotros lo dijisteis, ... jajajajajaja Todo para abajo dice Jon, dejarse caer hasta Avellaneda. Todos poniendose los chubasqueros, ... no transcurren ni cinco minutos cuando, de la rueda trasera de Palma, nace un surtidor. Todos recordamos a Jabi y su pinchazo en el bidegorri hace, no demasiado tiempo. Hala, a reparar de nuevo... tenemos la negra. Parecido tiempo en reparar que antes. Iosu, nos acordamos de tí... como de Santa Barbara... solo cuando truena...jajajajajaja

Bajamos hacia Avellaneda

7 para reparar un pinchazo. 

Lección magistral a cargo del Marqués. Iker y Julio escuchan fascinados

         Superados ya los problemas mecánicos, la duda se plantea ahora en si tomar café o no. El retraso acumulado es importante. Tomar café también, jeje. Lo intentamos en Avellaneda en una, al parecer, casa rural...¡cerrada! Pues bajamos hasta El Carral y allí tomamos. Perfecto. Vertíginoso descenso desde Avellaneda en el que Isma hace una auténtica demostración ... Nos detenemos en el Restaurante que hay junto a la rotonda del Carral, aparcamos nuestras bicis y ... No, está cerrado, está el suelo mojado todavía. Está claro que hoy no es nuestro día. Pues nada, toca seguir. A ver si tenemos más suerte en Mercadillo.... Nos detenemos allí. Justo enfrente del ayuntamiento y Oskar nos informa de que allí no tienen ni un triste pintxo que llevarse a la boca. La gente se esta empezando a poner nerviosa. Que si se hace tarde, que si lo dejamos, ... Vamos a votar... propongo. ¿Quien quiere tomar café? Por abrumadora mayoría (no Oskar, es cierto, no he contado, jajajaja) decidimos parar a tomar café pero como ahí no hay pintxos vamos a uno que está un poco más abajo, en la carretera La Sota. Y aquí sí. Lo conseguimos. ¡Por fin! Ha sido más duro buscar sitio para tomar café que subir la cantera.

Copamos el bar. Cafecito!!!!!!

Ambiente distendido, ambiente divertido, ambiente BTTANDO,...

¿Azúcar moreno por favor?

          Después de un merecido y reparador café nos dirigimos, por asfalto,  a tomar la Vía Verde en sentido contrario al recorrido esta mañana. El paso cuidadoso por tres arquetas nos dejan al borde de la rampa que ahora sí, bajaremos sin problema, al contrario de esta mañana que nos tocó ascenderla. Cuando nos situamos encima de la Vía Verde y creo que ya sólo queda pedalear hasta la Aceña y desde allí dejarnos llevar hasta casa, me dan la sorpresa del día y me dicen que acortaremos yendo hasta El Arenao y desde allí subiremos hasta la Vía Verde por un, también desconocido para mí, cuestón de la pera. El momento competitivo de la jornada está al caer. Iñaki viene cizañando hace un rato ya para que Lopa y Gipu se den de leches para ver quien llega antes a la Vía Verde. Se hacen los remolones, ninguno de los dos quiere saber nada. Palma y yo comenzamos la subida, sin competir. En nada aparece como un loco Julio. ¿Irá rápido para sacar fotos o para lograr alguno de esos KOMs de los que tanto le oímos hablar en el grupo de whatsapp? En nada Lopa, fuerte. A por Julio. Y seguido Jabi. Es raro, no suele entrar al trapo, ¡que pena que lo haya decidido tan tarde! Es un rampón inhumano. Me dan envidia. Pero ni lo intento. La subida se divide en dos tramos. Uno durísimo y otro más llevadero después. ¡Si lo llego a saber!... jajajajajaja

Vamos llegando a la Vía Verde- David, Isma y Lopa

Lopa y Palma

Iñigo, Ángel y Gipu... y Lopa claro, que no se quitaba el tío

Álex cerrando el pelotón. ¿Véis su cara? 

Iñaki cizañeando a Lopa y Gipu

Al fondo Julio, Lopa detrás y David a ritmo

David sigue a ritmo y Gipu escopetado

No es como empieza. ¿No había que llegar a la Vía Verde?

Es por sacar las fotos eh....

Mirad el que dice que siempre sale el último y que tiene documentos gráficos que lo demuestran

           Esperamos a los que se toman con más tranquilidad la subida y continuamos de regreso acompañados por Jon, que tiene la gentileza de llevarnos de vuelta durante un rato más... hasta alcanzar un descenso hasta el río Barbadun que formaba parte de sus intenciones iniciales antes de encontrarse con la sorpresa que se encontró. Llegados a este punto nos despedimos completamente convencidos de que nos devolverá la visita en cuanto físicamente le sea posible. ¡Ánimo Jon!

Camino a casa. Es tarde. Pero... ¿lo bien que lo hemos pasado?

Jon se despide hasta la próxima. Será pronto

          En cuanto hemos alcanzado la Vía Verde, Álex ya ha dejado claras sus intenciones. Ya se donde estoy, no os preocupéis, ya llegaré, ... sin respirar. Yo creía que se ahogaba, ... jajajajajja. Pronto da buena prueba de ello y ocupa el último lugar del grupo, que digo del grupo, de más atrás, ... Pues si te piensas que así te vas a librar... Ángel primero, Gipu y yo después, y más tarde Iñigo e Isma que han vuelto a nuestro encuentro le hacemos compañía en esta larga agonía que es su regreso a Trapaga. Sorpresa agradable antes de llegar al cruce del Campillo. El resto del grupo se ha detenido a esperar, a pesar de las prisas allí están, para entrar todos juntos en nuestro querido bidegorri. Es de agradecer el gesto. Más cuando son más de la una del mediodía. Sin palabras.

Isma e Iñigo en busca nuestra. De Álex, Ángel, Gipu y mía

Y luego ponen el ritmo. Gérmen de BTTANDO al igual que Ángel, David M., Paco, Borja, Kike, ... 

Ahí están, esperando al grupo. ¡GRANDES!

         Y ya la única decisión que tomar es la de lavar la bici. En principio no tenía intención pero al ver los que se dirigen a Las Postas para lavarlas no puedo evitar irme con ellos. Nos despedimos del resto a la altura de las escaleras que bajan al apeadero de Gallarta. Impresionante día una vez más, una vez más pero diferente, auténtico, genuino. Hay que repetir, ¿vale?

Hasta la próxima. Atentos al whatsapp

Bicis limpias. Trabajo hecho. ¡A por las rabas!

           El resto no tiene mucho más misterio. Ascendemos el estrecho sendero a Sanfuentes para lavar nuestras bicis y una vez maqueadas volvemos a recorrerlo para bajar al bidegorri y recorrer los últimos kilómetros hasta casa. En la rotonda de los bomberos nos despedimos de Aitor y en la rotonda del campo de fútbol decimos agur a Gipu. En las escuelas Isma me deja y recorro en solitario el camino a mi trastero. Hemos dejado atrás un día grande. Un día en que lo más importante no era la bizi, ni siquiera la ruta a realizar, los metros ascendidos, la media, ... hoy lo importante era Jon, mostrarle nuestro apoyo y decirle que le queremos ver pronto de vuelta con nosotros...¡Ubieta nos espera!