domingo, 9 de febrero de 2014

RUTA AL PAGASARRI (por Alonsotegi)

     Suena un mensaje en el wathsapp, mala señal a las 8.00 horas. Iñigo se cae de la lista por causas de fuerza mayor. No empieza bien el día. De esta manera a las 8.30 horas tal y como habíamos quedado salimos desde Trapaga Ángel, Álex, Oskar y yo dirección Alonsotegi. Cuando nos encontramos a la altura del Max Center se nos añade Isma completando la grupetta del día de hoy en que el objetivo hace que tengamos que rodar unos 12 km por asfalto hasta llegar al pueblo de Alonsotegi. Nos espera el Pagasarri.
     Esa aproximación al pueblo de Alonsotegi la hacemos por una variante desconocida para nosotros. La propone Álex y es una carretera sin nada de tráfico que va desde Burtzeña hasta nuestro destino por este lado del río. Retomamos la ruta que propone el Garmin y nos disponemos a sufrir durante algo más de una hora de dura ascensión.
Pedalear en llano es una buena forma de prepararse para lo que nos viene encima

Nuevo integrante del grupo. A ver si disfruta y se convierte en habitual

Sin nada de tráfico, como se puede apreciar

Álex nos guía en esta parte del recorrido
     Cinco primeros kilometros durísimos consiguen que un par de los integrantes del grupo den con sus huesos en tierra. Habrá que dedicar un rato a esas calas. En el inicio nos adelanta un txirrindu al que avisamos de la poca presión de su rueda trasera. En compensación nos abre un portillo que cierra el paso en la parte más dura del primer tramo hormigonado. Durante un rato desaparece, imaginamos que para solucionar su problema mecánico. No tengamos miedo, nos alcanzará en un muy corto espacio de tiempo. Cuando llevamos 4 km de ascensión y en un despiste lamentable nos fiamos de los carteles indicadores y continuamos de frente en vez de tirar a la derecha. El resultado es que lo que hubiese supuesto un suave ascenso en un amplio zig-zag se convierte en un tramo recto empinadísimo que nos obliga, a unos más pronto y a otros más tarde, a echar pie a tierra para poder superar el tramo.Son 200 metros en los que praticamos empujabike.
Las primeras cuestas mantienen el grupo unido

Estupendísimo y soleado día de ciclismo

Cuando dejamos atrás el arbolado las vistas del Gran Bilbao nos dejan... sin palabras
     Unos 6 kilometros nos separan de nuestro objetivo, por una pista mucho más tendida que nos lleva en algun momento a perder altura con el consiguiente rebote del personal. En este tramo nos cruzamos con el único vehiculo a motor que veremos durante toda la subida. También aquí nos alcanza una cuadrilla de bikers bastante numerosa que a buen ritmo pronto nos dejan atrás. No sin antes verles desaparecer por una pista por la que en un principio no estaba previsto continuar. Esperamos a los más retrasados y decidimos descubrir otra posibilidad, no sin antes comprobar en el GPS que esa pista conducía también hasta el merendero. En esta zona bastante llana y arbolada nos encontramos con una gran cantidad de charcos y barro que ponen a prueba nuestra pericia encima de la bicicleta. En cuanto llegamos al merendero Isma y Álex se dirigen raudos hacia allí y Oskar, Ángel y yo nos diponemos a realizar el último esfuerzo del día no exento de riesgo en una última parte muy, muy complicada; lugar en que tendrá lugar la tercera caída de la jornada, afortunadamente todas sin consecuencias.
Último esfuerzo para llegar al merendero, Ángel abre huella.

La fotografía no refleja la realidad. Vistas indescriptibles.

Isma y Álex prefirieron ir pidiendo los cafés

El merendero, ... caldito, ... pintxo tortilla, .... 

Hemos repostado y nos disponemos a emprender el regreso
     Despues de las fotos de rigor en la cima y de la confesión de alguno de los integrantes del grupo que nunca había subido hasta allí, que siempre se había quedado en el merendero descendemos rapidamente hasta el merendero para dar buena cuenta de un caldo bien caliente y un reconfortante pintxo de tortilla (¡que pasada, todavía al escribir esto se me hace la boca agua!, ¡y son las 12 de la noche!). El calor de la chimenea central del merendero nos resulta especialmente acogedor. Se nota que estamos en el Paga. Pocos montes acogerán tal cantidad de gente un domingo cualquiera. Parece día de romería y tanto en el ascenso como, mucho más, en el descenso debemos extremar las precauciones para no sufrir ningun percance. Descendemos vertiginosamente y casi sin darnos cuenta hasta Alonsotegi por otra pista diferente. Pista que resulta estar hormigonada en buena parte de su recorrido. Personalmente no creo que la proponga para una futura ocasión.Ya en el pueblo deshacemos el camino andado esta mañana temprano para llegar a Burtzeña y por la rotonda del antiguo matadero volver hacia Lutxana con la intención de coger el bidegorri que nos conducirá hasta la gasolinera del Carrefour donde lavaremos nuestras bicis. Una vez realizada la labor nos despedimos de Isma que parte hacia Baraka y nos vamos a Trapaga para dar por finalizada la excursión cuando son las 12.45 horas del mediodía. ¡Llegamos a tiempo para los potes del domingo! 
Toca esperar a los rezagados. Cuando se baja rápido es lo que toca.

Con mucha tranquilidad y más precaución en el bidegorri de Lutxana

Y por aquí hasta la gasolinera para limpiar las bicis