Malos tiempos para dedicar a las dos ruedas. Circunstancias personales me impiden rodar con la bizi. Ayer tuve el placer de "sufrir" con Sergio y David. Hoy se nos han sumado Txerra e Iñaki Gorrotxategi. A las 16.00 horas salimos desde Sanfuentes a donde hemos llegado Sergio, Iñaki y yo por el bidegorri. David es el último en llegar y partimos raudos hacia las profundidades salvajes del río Barbadún. ¿nos acompañáis?
El tiempo que dedicamos a la bizi pone en evidencia la forma de cada uno y así Sergio, Txerra y David ponen un ritmo alto (para mí). En cuanto les abucheamos un poco se colocan detrás nuestro y queda en manos de Iñaki y mias la "responsabilidad" de dar ritmo a la martxa. ¡que nos caemos! ¡Un poquito más hombre, que me caigo por falta de equilibrio! Pero al Marqués y a mi no nos molestan los comentarios, es más, nos animan para mantener así nuestro pedalear cansino, jajajajajaja
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| Los que empezamos |
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Los que terminaron
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Con la temperatura que hace el río estará seco, no se cansa de decir David. Que sí David... que no he quitado el guardabarros, que tenía claro que bajábamos al río... Una paradita en la fuente junto al túnel del sóbaco será el único respiro que nos tomaremos antes de dejarnos caer hacia el río Barbadún.
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| Dificil mantener el equilibrio |
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| Por la Vía Verde |
David y Sergio desaparecen rapidamente de nuestra vista. Iñaki y Txerra un poco más atrás. Mi inactividad junto con mi ya sabida ausencia de pericia logran que me retrase poco a poco hasta llegar a un punto en que dudo que vayamos bien y mando parar a Txerra e Iñaki. Un par de pistas que se iban por la derecha me despistan, hace mucho que no paso por aquí, y llamo a David para "recriminarle cariñosamente" que no nos hayan esperado, jajajajajaja. Me dice que no hay posibilidad de pérdida, que todo recto y efectivamente en menos de 2 minutos les vemos aparecer detrás de una curva.
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| Esperando a los lentos |
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| El más lento |
Una vez con Sergio y David tomamos un sendero que serpenteando por las orillas del Barbadún nos llevará hasta el barrio de El Arenao, no sin antes pasar por unos parajes absolutamente increíbles ya conocidos por todos nosotros. Senderos amables que hasta trapasar un pequeño arroyo que pone a prueba nuestra pericia son motivo de disfrute y diversión. Una vez rebasado el río hay que arrearse los machos y empujar un poco la bike hasta volver poder a montar y seguir nuestra penitencia hasta lo alto del camino.
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| El río |
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| Habilidad |
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| El Marqués |
Pero mi estado de forma es tan lamentable que debo poner varias veces más pie a tierra en las continuas subidas que vamos encontrando en nuestro paseo vespertino. David y Sergio aprovechan cualquier ocasión para regalarnos estupendas instantáneas que ilustran la crónica, que no deja de recordarme Sergio debo escribir debido a la asistencia el día de hoy.
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| Demasiado duro |
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| Completamente de acuerdo |
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| ¿Ha salido el sol? |
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| Fin de la cuesta |
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| Esperadme cabrones |
Es justo cuando volvemos a comenzar una de las suaves subidas que jalonan el recorrido cuando mi bizi hace algo raro que impide mi pedaleo. Observamos Sergio y yo el problema y en un primer momento no somos capaces de ver la rotura total de la vaina derecha de mi Orbea Occam. ¡No doy crédito!.
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| La vaina |
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| Molino en ruinas |
Evaluamos las soluciones posibles y descartando todas las demás nos refugiamos en la del rescate. LLamo a Nata para pedir socorro y venga en mi auxilio. No estoy tan lejos del Arenao, quizás más cerca del cruce que sube a Montellano. Quedo de acuerdo con Nata y a pesar de que les despido varias veces, estos mis compañeros vienen conmigo hasta las ruinas del molino que vemos bajo estas lineas. 100 metros me separan de la carretera de Sopuerta.
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| Paisaje bucólico |
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| ¡que formales! |
Con mucho pesar me alejo de ellos, cruzo el Barbadún y me dirijo a la carretera de Sopuerta al encuentro de Nata. Menos de 5 minutos me lleva alcanzar el asfalto. 10 minutos más hasta un lugar que considero apropiado para que mi rescatadora se detenga. En ese trayecto por asfalto recibo una llamada de teléfono, Nata que me avisa que sale ya... ¡No! ¡Es Iñigo! A la cita callando ha salido detrás nuestro y al no encontrarnos me llama preguntando donde estamos. Le cuento el incidente y le digo que estos estarán por el Arenao. En el puente de madera del Arenao estoy yo, me replica. ¡Joder! ¡llamales! ¡Rápido! Más tarde me alegraría saber que habían hecho el regreso juntos.
Mucho antes de lo que esperaba llega Nata, cargamos la bici en el coche y volvemos pensando la suerte que he tenido de romper la bici donde la he roto. Sin peligro de caída.
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| Esperando el rescate |
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| Entorno único |
Creo que hoy para mi ha sido un punto de inflexión. No, no por la rotura de la bizi, sino por la oportunidad de volver a pedalear en grupo con esta gente de BTTANDO. Otra vez un domingo entre semana cualquiera. Txerra me vuelve a despertar el gusanillo de las crónicas... Creo que vuelvo a disfrutar de la bizi y siento la necesidad de contarlo. Muchísimas las ganas de compartir pedales con todo el universo BTTANDO. Aprovechemos la oportunidad que nos ofrece Unai en la KDADA nocturna de mañana jueves. Da igual el momento, da igual el lugar, lo importante es disfrutar....¡Goazen!
