sábado, 30 de mayo de 2015

LAS BARDENAS (desde MÉLIDA)

          Hace no demasiado tiempo. El año pasado después del verano. En una de nuestras excursiones "especiales", yo creo que fue la del Canal del Juncal, o quizás Orduña, no recuerdo bien. Lo que recuerdo es que Iñigo nos contó que había estado en bici en Las Bardenas. Que era precioso, que lo habían hecho en el día, ... Se me pusieron los dientes superlargos. ¡que gozada, que envidia! supongo que diría yo. Oye, si quieres le comento a mi hermano Borja y organizamos una, me debió responder. Estuvo a punto de "salir" en el mes de febrero pero las frecuentes lluvias aconsejaron su suspensión. Hoy es el día. Borja, de común acuerdo con su amigo Pedro (que nos hará de guía) nos ha preparado un plan irrechazable. Madrugón para llegar a Mélida con la intención de empezar a pedalear hacia las 9.30 horas. Paseo "con guía" durante toda la mañana por los sitios más destacados de Las Bardenas. Comida en Caparroso, un pueblo de las inmediaciones. Regreso para estar en Trapaga hacia las 19.00 horas. 
          La víspera hacia las 12 de la noche un whatsapp de Manu me avisa de la imposibilidad de su asistencia. Lástima, con la ilusión que tenía. Esta mala noticia hace que al final seamos 8 personas las que salgamos del polideportivo de Trapaga a las 7.00 horas, a saber: Iñaki (a las 6.30 ya estaba allí el tío), Paco (demasiado tiempo hacía que no nos acompañaba uno de los socios fundadores de BTTANDO), Iker, Huesos (amigo de Iker), Ángel, Iñigo, Borja y Natxo (el que esto escribe). La extraordinaria puntualidad de todo el mundo logra que a las 6.50 horas ya estén todas las bicis cargadas y estemos esperando a Borja. Este apura puesto que no tiene nada que cargar y cuando pasa por poco la hora prevista emprendemos la ruta Iñigo, Ángel y Borja (en el coche de éste) y Paco, Iñaki, Huesos, Iker y yo (en el mío). No hemos salido del aparcamiento del Poli y ya realizamos la primera parada: Iker no es capaz de encontrar el cinturón de seguridad. Culpa mía, lo pillé al montar el asiento. Solventado el inconveniente nos ponemos en marcha.

Pedro, Ángel, Iñaki, Natxo, Borja, Iñigo, Iker, Jorge, Paco, Jesús y Huesos
          Cuando haces un viaje temprano, por autopista, de unas dos horas y pico de duración, habiendo dormido poco (por los nervios), todo hace pensar que resultará un poco tedioso. Nada más lejos de la realidad, la amena conversación con Paco y, a pesar de la extrema sonoridad del interior de la furgo, en muchas ocasiones con los tres de atrás da por resultado que llegemos a nuestro destino sin apenas darnos cuenta de la distancia (240 km) transcurrida. Borja nos presenta a Pedro, sacamos las bicis del interior de los vehículos y cuando nos estamos preparando para el inicio de la marcha llega la primera de las sorpresas de la jornada: Pedro y su madre nos han preparado un estupendísimo almuerzo, chistorra, café con leche, magdalenas, ... ¡ y yo que había desayunado fuerte porque calculaba que no ibamos a tomar nada hasta mediodía!

          Con los estómagos llenos, después de realizar la operación más complicada del día (meter el pan en las mochilas de los participantes) nos despedimos hasta la vuelta de la madre de Pedro y comenzamos una excursión muy deseada por muchos. Callejeamos hasta salir del pueblo y tomar la primera pista que nos hace tomar conciencia de que "el polvo" será nuestro compañero omnipresente durante toda la mañana. Tres kilometros y medio llevamos recorridos cuando el terreno pica decididamente hacia arriba. No asustarse, estamos en Las Bardenas, los desniveles no son importantes. Nos dirigimos al mirador de La Estroza por pistas anchas que permiten mantener una agradable conversación entre los integrantes del grupo. A izquierda y derecha todavía campos cultivados cuando atravesamos la balsa del Lentiscar, más adelante no habrá... NADA. LLevamos casi 16 km de pedaleo cuando llegamos al Mirador de La Estroza. Toca parada y extasiarse ante el espectáculo visual que se ofrece a nuestros ojos. ¡Que diferente es todo!, ¡que belleza tan especial!


Hospitalidad exagerada. Antes de comenzar. Gracias Pedro

Iniciamos el recorrido

Saliendo del pueblo

El resto del grupo

El más veterano en primer plano, el más bisoño al fondo
Las Bardenas desde el Mirador de la Estroza
          

Alucinando con el paisaje

Comienzo de ruta impactante
    
          Después de las fotos de rigor y de disfrutar durante un rato muy agradable volvemos sobre nuestros pasos para tomar rumbo al segundo punto de interés que ha programado Pedro en la jornada de hoy. Es en uno de estos tránsitos entre punto y punto cuando Pedro nos cuenta que contaremos con la inestimable presencia de Jesús, oriundo del lugar y en palabras de Pedro profundo conocedor de la zona en que nos encontramos. "Siempre me enseña algún lugar que todavía no conozco", nos dice nuestro anfitrión refiriendose a uno de los organizadores de LAS BARDENAS EXTREM, Jesús. Creo que no somos conscientes del todo de lo afortunados que somos en contar para nosotros, en exclusiva, con tales cicerones. Tres kilómetros de desandar lo andado y dos más en dirección Sur nos sitúan en el borde de la Meseta de La Estroza pero ante el Castillo de Peñaflor. Km 20 de nuestro recorrido. Lugar donde, según dice Pedro que cuenta la leyenda, estuvo prisionera la Princesa Blanca de Navarra como castigo de su padre Juan II El Malo por no querer matrimoniar a finales del siglo XV con el Principe de Aragón. Es en este punto de reunión donde escucho que Paco ha estado a punto de perder el GPS. Bueno, de hecho lo perdió y tuvo la grandísima suerte de que Iker observara algo rebotando hacia fuera de la pista, parara y comprobara atónito que era un GPS, evidentemente desprendido de una de las bicicletas que le precedían, la de Paco.

El Castillo de Peñaflor
          Descendemos por el borde de la meseta dejando el castillo a nuestra derecha cuando nos topamos con Jesús que ha venido a nuestro encuentro. Llega con un buen calentón porque nos ha cogido antes de iniciar nosotros el descenso. Un nuevo integrante para el grupo. Sin más dilación que las consabidas presentaciones reanudamos nuestro pedalear, nos esperan parajes sorprendentes. Después de la pronunciada bajada mencionada anteriormente nos volvemos a reagrupar para seguir pealeando en dirección al Castil de Tierra. En el trayecto otra sorpresa, Jorge, hermano de Jesús y, como él perfecto conocedor de la zona. 5 kilometros después de nuestra última parada Jorge se adelanta para mostrarnos un paso "diferente" en el barranco del Vedado. Todos echamos pie a tierra para atravesar el pequeño lecho de agua, no tanto por el agua en sí, si no por la dificultad de pedalear en su orilla contraria. Perdón, he mentido. Iñaki ante la aclamación popular intenta el desafío pero no lo consigue. Estoy completamente convencido de que con un par de veces más que pasaramos por aquí las cosas serían muy diferentes.


Barranco del Vedado

Iñaki grande... el único que lo intenta

Jorge y Pedro

Borja e Iñigo

Siempre sonriendo, siempre disfrutando

Diferente
         
          Sólo dos kilometros nos separan del Castil de Tierra, lugar emblemático de Las Bardenas y punto de interés que atrae numerosos visitantes, franceses en su mayor parte. Unas vallas delimitan el perimetro para proteger el Castill. Aún así somos testigos de cómo un "artista" francés protagoniza, detrás de las vallas, la grabación de un videoclip. Algunos aprovechamos para comer una barrita y contemplar la destreza del piloto del dron. Algunos alucinan, eh Iñigo!!!!! Como no puede ser de otra forma aprovechamos la ocasión para obtener nuestra fotografía oficial de la marcha. 


Jesús, que lujo de guía

Los otros dos guías. Vicio.

Castill de Tierra en la mano de Iñaki

Espectacular

Aupa Athletic

Hicieron la ruta hace un tiempo y nos pusieron los dientes largos, por ellos estamos aquí

Satisfacción
          Después de recrearnos con la singularidad del lugar proseguimos nuestra ruta volviendo sobre nuestros pasos por una pista de cierta importancia durante unos 10 kilometros. Llegados a este punto nos vemos obligados a cruzar el Barranco del Caldero por una bajada muy técnica que sólo Borja completa en su totalidad. Tras cruzar el cauce el otro lado es impracticable, por lo que se impone la subida a pie en un primer tramo y el reto después por parte de Jorge, Jesús y Pedro de superar un singletrack decididamente complicado. Huesos es el primero que lo intenta en serio, demasiada cadencia en mi opinión, no lo consigue. La mayor parte de los excursionistas observan desde arriba para inmortalizar el momento. Iker es el siguiente que lo intenta, al ver como le sobraba cadencia a Huesos pone un desarrollo más duro, demasiado, se queda clavado apenas iniciado el esfuerzo. Me toca. Plato pequeño y un piñón alto tercero o cuarto por arriba. Ante mi sorpresa lo supero con relativa facilidad pero... ¡ostias! si hay otro escalón más. Ese no se veía desde abajo, o no parecía tan duro. Dudo entre dos trazadas y escojo la que me hace caer... ¡ cagüen! Falta Iñaki. No le veo superar el primer escalón porque he tardado demasiado en quitarme de enmedio estoy convencido que lo ha superado con facilidad. En el segundo le aconsejo que tome la trazada que no he tomado yo pero, ... ¡tampoco lo consigue! Ostia Iñaki, si vas con el plato mediano... ¡que makina! ¡como vas a subir así!


Selfie

Inmensidad 

Borja se queda

Barranco del Caldero

Empujabike

Escalón muy dificil, ... para nosotros

Supero el primero, no el segundo
          Continuamos nuestro camino y observo consternado que Borja va a sufrir hoy más de la cuenta. Hasta ahora pensaba que el ritmo tranquilo con el que rodaba era producto de la prudencia y de su táctica para economizar sus piernas. Ahora me doy cuenta que va jodido. Cierto que hemos estado bromeando sobre sus comentarios pre-ruta en los que nos decía cómo Pedro y él estaban en una forma muy justita pero se ha quedado solo. Pedro está en una forma envidiable. Muy parecido a mi de aspecto... ¡ como anda el tío! Intento a partir de este momento pedalear más tranquilo en consideración a Borja pero ... ¡que difícil! Cuando estás charlando muy entretenidamente con alguien poco a poco vas a más. Sin pretenderlo pero... 

          Km 38 de recorrido y nos bajamos de las bicicletas para adentrarnos en otro paisaje espectacular, el Barranco del Águila. Me recuerda a las piedras desprendidas enormes que rodean la Laguna Negra, alguno está de acuerdo. Se oye algo relativo a almorzar e Iñaki propone aprovechar una mesa pétrea que parece a propósito para la ocasión. Señores llega el momento de nuevo de llenar el buche. Jorge comenta que hubiésemos debido avisarle, habría traído la bota de vino. Otra cosa que falta es... ¡chorizo! Nadie se ha atrevido a traer chorizo, mucho miedo a competir con el de León de Manu. Como es habitual en nosotros vuelve a sobrar de todo y después de recoger.... ¡seguimos!


Barranco del Águila

Otra perspectiva

Pues va a ser que almorzamos eh
Mahaia prestatzen
           El retraso en la salida desde Mélida fuerza que uno de los "objetivos" de la jornada, El Monumento al Pastor, no pueda ser visitado. Los expertos, con Jesús a la cabeza opinan que nos retrasaríamos enormemente. Me imagino que también habrán tenido en cuenta el estado de forma de Borja. Por un lado decepción por no visitarlo, por otro... ¡Así tenemos un motivo para volver! ¿verdad?. Además hay otras zonas más "auténticas", más Bardenas "puro" que no hemos podido visitar. Ello es debido a las restricciones de paso por la nidificación de las aves en una determinada zona y "evidentemente" el poligono de tiro de Las Bardenas. ¡Bravo! Más razones para volver. 

          Vamos cerrando el círculo cuyo centro es el Mirador de La Estroza. Hemos almorzado tarde. La una menos cuarto cuando reanudamos la marcha. Toca apretar el culo. Borja va a sufrir muuuuuuucho. Recorremos unos 8 kilometros más antes de que nos despidamos de Jesús y Jorge que tomarán camino a Arguedas. Tramo de continuas subidas y bajadas  cortas pero intensas en las que unos pocos nos divertimos apretando los pedales. Chicos, ha sido un auténtico lujazo y un enorme placer haberos conocido y un privilegio que nos hayáis guiado por parajes recónditos de Las Bardenas. Espero que volvamos a vernos.

Últimos momentos con Jesús y Jorge
          Hacemos camino en dirección a la Bajada de las Yeguas, una cuesta de un kilometro y medio aproximadamente tendida pero que dependiendo del ritmo impuesto puede resultar muy dura. En una de las muchas charlas mantenidas a lo largo del día de hoy con Pedro me confiesa que a él le gusta más subirla que bajarla, que disfruta enormemente en su ascensión. Iñaki pasa hacia adelante, veo a Ángel bebiendo agua y no se da cuenta de la "maniobra" de Iñaki. Guarda el botellín y se pone hombro con hombro con Iñaki. En un segundo grupo nos mantenemos Pedro y yo. Charlamos, ¿charlamos? No, para nada. Habla sólo él. Yo le respondo con monosílabos. He perdido la capacidad de mantener una conversación. Pedro... no calla, está fuerte. Estoy convencido que hubiese podido segui a Iñaki y Ángel. Por detrás nuestro Iñigo, Iker, Huesos y Paco. Borja cierra la comitiva. 

          Y el espectáculo es grandioso, casi como el entorno que nos rodea. Iñaki y Ángel se van poco a poco. Yo intento seguirles, Pedro conmigo. Mas atrás la cosa se va espaciando, Iker, Huesos e Iñigo continúan juntos. Paco se autoimpone un ritmo cómodo. Borja... sufre. Ni Iñaki ni Ángel ceden un metro. No estoy seguro de quien de los dos llegó arriba primero, apostaría que llegaron juntos pero no lo sé. Lo que sí sé es que por más que me esforzaba en seguirles más distancia me sacaban. Cuando el tercer grupo cumbrea Ángel, en un gesto digno de aplauso, desciende la cuesta ascendida en busca del último rezagado al que no vemos porque le oculta un bucle del camino. Vemos como Paco con ritmo tranquilo pero con seguridad continúa su ascenso y al cabo de un rato aparecen Borja y Ángel a la par poliki, poliki, ... Borja nos contaría después cómo tuvo que detenerse totalmente acalambrado para intentar estirar un poco, razón por la que no le veíamos. ¡Bravo por los dos!


Fin de la "subida" de las Yeguas

Ángel y Borja, ... ¡Bravo!

          Unos 13 kilometros nos separan de nuestro destino. Ya no habrá más cuestas pero ahora el viento viene de cara. No es excesivo pero cuando estas flojo... ¡duele! Dos kilometros después de finalizar la ascensión volvemos a pisar terreno conocido. A partir de aquí recorreremos a la inversa el trayecto matutino. Giramos fuertemente a la derecha cuando faltan 10 kilometros para Mélida tomando el Camino del Cuarto. Y Pedro nos obsequia con otra bonita historia que ha llegado a sus oídos a traves de sus mayores, de sus abuelos, cuando en las noches de verano salían de sus casas y se ponían a "tomar la fresca", momentos de historias, momentos de recuerdos, ... El Camino del Cuarto es así llamado por la existencia en épocas pasadas, sobre el siglo XVIII, de bandoleros en la zona. El mayor de todos ellos y el más sanguinario Marcuello, que asaltó el Palacio de los Escuderos en Mélida y tras robar sus pertenencia quemó viva a la dueña de la casa. Una vez que Marcuello fué apresado su cuerpo se descuartizó en cuatro partes. Una de ellas se clavó en una pica a modo de escarmiento y aviso a malhechores en el camino que hoy toma el nombre de Camino del Cuarto y es el camino principal que en su día comunicaba Carcastillo y Valtierra.

          Y escuchando estas historias uno se olvida del bueno de Borja hasta que en el cruce en que abandonamos el Camino del Cuarto nos detenemos a esperar a los rezagados. Me suena el teléfono. Es Iker que se ha quedado junto con Huesos acompañando a Borja. Éste se encuentra completamente acalambrado. Me lo dice más que nada porque se ha detenido a estirar y para que sepamos que no está bien. Se habla de seguir unos y esperar otros y nos negamos en redondo. Hemos salido juntos y llegamos juntos. Al poco llegan los rezagados y cuando vamos a reanudar la marcha...  ¡Pinchazo! Raro había sido que libráramos. Decidimos que Borja junto con Pedro, Iñigo y Huesos vayan adelantando y el resto seguiremos cuando ... Iñaki.... repare el pinchazo. Más de cinco minutos buscando el "pincho" y nada. Iker, Ángel, Paco e Iñaki buscando y nada. Siguiendo el método científico de localizar el agujero en la cámara observan que el pinchazo es interior. La culpa al parecer es de los fondos de llanta que Iñaki tiene en un no muy bien estado. A todos nos ha pasado Iñaki. Otra cosa más para el zurrón de sapiencia bicicletera.

Cuatro para reparar un pinchazo
          Los seis kilometros que nos restan para llegar se pasan volando. Ayudados también por lo favorecedor del terreno llegamos a Mélida cuando son las 14.30 horas. Mientras el resto del grupo ya se ha pegado un estupendísimo manguerazo que a nosotros también nos sabrá a teta. Un auténtico placer el manguerazo en la casa de los padres de Pedro. Chapeau!!!!! Nos vestimos, agradecemos a los anfitriones la increíble acogida que nos han dispensado y nos dirigimos raudos, a Caparroso, lugar donde comeremos. Las anécdotas durante la comida, que si las jarras de cerveza con limón, que si el cortado con sacarina de Iñaki, ... no hacen sino que poner el broche casi final al día de hoy. Nos falta el regreso a Trapaga que emprenderemos una vez nos hayamos despedido de Pedro, agradeciéndole enormemente y nunca será suficiente el pedazo de día que nos ha regalado hoy. Esperamos volver a vernos pronto Pedro. Un enorme abrazo. Ha sido un auténtico gustazo conocerte.


Con el patriarca de la familia

          Los aproximadamente 240 kilometros que nos separan de casa pasan, como durante la mañana, de una manera amena, divertida, ... y con una puntualidad británica llegamos al aparcamiento del polideportivo de Trapaga cuando son las 18.45 horas. Caras de cansancio escondidas detrás de sonrisas de enorme satisfacción. Saludos, agradecimientos, recuerdos, ... todo ello con la seguridad de que hemos vivido otra jornada memorable de bizi. Una vez más... GOXATZEN!!!!!!!!

          Nota: Un afectuoso y emotivo recuerdo para todos aquellos que por una u otra razón y queriendo haber participado en esta excursión no habéis podido hacerlo. Repetiremos.




         8/9/2015.- Incorporo impresionante video realizado por Iker. Gracias Makina