15 de septiembre de 2025 y nuestro presi me manda un wasap para que entre Vero y yo organicemos una salida en BTT por la zona de influencia de la primera, Derio y alrededores. Nos ponemos manos a la obra y después de una cuantas vueltas fijamos la fecha del 19 de octubre como la más conveniente para todos. A Vero le encanta el enduro y va a ser divertido llegar a un consenso en el recorrido. Anunciamos la fecha con antelación para que la peña vaya apuntándose y quedamos para hacer un reconocimiento previo del recorrido.
Necesito un aliado para apoyarme en la elección del track y me acuerdo del marqués, que como no puede ser de otra manera, se anima encantado. Realizamos el reconocimiento de la zona con Vero, que viene acompañada de Juancar y Diego, dos integrantes de su grupeta que nos harán de guías el día de la marcha. Superagradecidos por el trato recibido y el mimo y cuidado conque nos tratasteis a Iñaki y a mi por esos endiablados senderos.
El 5 de octubre se celebra la asamblea general de BTTANDO y ya cuando nos vamos después de la jamada Vero y yo nos damos cuenta de que la mayoría de miembros de BTTANDO susceptibles de apuntarse a la marcha no pueden por problemas de agenda. Nos decidimos a cambiar la convocatoria al 26 de octubre. Desafortunadamente y según se va acercando la fecha de la ruta los pronósticos del tiempo no son nada halagüeños. Pasan los días y la reserva del restaurante más el tiempo malísimo que dan para el domingo nos hacen decidir suspender la salida. A este paso no la vamos a hacer nunca.
Nueva fecha prevista 9 de noviembre. Cada vez se complica más la asistencia del personal. Aquel pasado 3 de octubre comprobé en mis piernas que la decisión de montar plato de 32 en lugar del de 30 ha sido un error mayúsculo; y aunque mi estado de forma no es el de mediados de septiembre veo la necesidad de cara al invierno de volver a poner el 30 para subir dignamente. Imaginaos el estado de forma un mes después habiendo tocado muy poco la bizi. Me va a tocar sufrir como un perro.
Gracias a dios se acerca el día de la salida y el tiempo pinta espléndido. Anulamos la jamada porque los días previos dan malísimo y con el tiempo no se puede jugar, además no se había apuntado casi nadie a la comida, así nos quitamos un condicionante de cara a mantener o suspender la marcha. Kike, Alan, Igor, Palma, Lopa, Iñaki, Aitor, Txosan, Alex, Vero y yo quedamos en el parking del campo de futbol de Zamudio, allí Vero nos presentará a Juanan que nos hará de guía, ante la imposibilidad de acudir de Jancar y Diego, en la siempre complicada zona del Vivero. ¡¡¡12 participantes!!! Ni tan mal.
Los que quedamos en Trapaga somos conscientes que tenemos que pulir la organización de los coches para que nadie acuda innecesariamente con su coche y luego tener que dejarlo allí. Desde la organización nuestras más sinceras disculpas, intentaremos mejorar.
8.35 horas de la mañana y emprendemos la ruta hacia el Vivero, todos excepto Juanan, que nos alcanzará de camino. Antes de abandonar el asfalto 5 km después nuestro guía ya rueda con nosotros. Los 2 últimos kilómetros en marcada ascensión. Un brusco giro a izquierdas nos deja en una pista que continúa ascendiendo. El cambio de guía respecto al reconocimiento hace que Juanan proponga continuamente y Vero le responda a favor o en contra. Otro par de kilómetros más para arriba pisteando y tomamos la primera trialera, de unos 300 metros de longitud, que desconozco como lo hicieron los demás pero que yo mayoritariamente realicé a pie. Todas las raíces que el pasado 3 de octubre estaban sequísimas hoy resbalan de lo lindo. Eso acompañado a mi torpeza habitual me hacen ver que voy a sufrir una barbaridad, se me llega a pasar por la cabeza quedar directamente en el hamaiketako o incluso pirarme para el coche. Veo que Iñaki anda parecido a mí y no consigo ver a Kike, que también padece un montón en estas situaciones. Lopa, Alan, Aitor, Palma, Vero y, evidentemente Juanan, disfrutan una barbaridad aquí. A Txosan y Alex no se que les parecerá...
Km 10 de ruta y caracoleamos descubriendo antiguos nidos de ametralladoras del Cinturón de Hierro. Los más atrevidos descienden una breve pero divertida trialera y nos alcanzan al resto que compartimos pedaladas con otro grupo de bikers conocido por Vero. En esta ocasión la trialera de menos pendiente y con menos raíces la disfruto un montón y mi percepción de la salida va cambiando poco a poco. Con la jeta habitual que me caracteriza le encargo al Marqués que saque fotos para ilustrar esta crónica, aprovechando que monta una emtb y pocas excusas puede poner.
El recorrido es espectacular, cierto es que las lluvias de estos días han hecho ciertas zonas más complicadas, pero el disfrute es máximo. Km 12 y llegamos a la zona conocida como la casa del guarda, una zona recreativa con un par de frontones, una bolera, ... A partir de ahora y durante unos 6 km disfrutaremos de la vertiente de Galdakao. Decidimos que es pronto para el hamaiketako y, con muy buen criterio como veríamos después, seguimos pedaleando en esta ocasión hacia abajo.
Todos vamos cogiendo cierta soltura, y haciendo caso omiso al consejo de Vero: " Soltad frenos y sin pensar ", disfrutamos enormemente del recorrido. En un parón de reagrupamiento Igor, inexplicablemente, se mete un piñazo de padre y muy señor mío. La cara de rabia es brutal Típica caída que se engancha la cala y... ¡cataclon! Pasada la preocupación inicial y ante la ausencia de daños el vacile acompañará al protagonista hasta llegar a los coches.
Presión baja, presión alta, ... ¿cuanto llevas tú? Pues yo llevo... Quitamos presión, ponemos presión,... Vaya mundo el de las presiones...
Lo cierto es que las bajadas son divertidas, pero sin pensar... Km 15, nuevo reagrupamiento después de una bajada disfrutona en la que he pegado con el hombro en un árbol que ha aparecido en medio del camino, menos mal que la derrapada que me ha hecho perder la trazada ha logrado que me detuviese casi completamente antes de golpear con el árbol. Aqui Juanan nos ofrece la posibilidad de ir por un camino más extremo. Tan extremo que no para de insistir para que nos lo pensemos bien los que queramos ir por él. Sin problema, unos iremos por la ruta alternativa y nos juntaremos unos pocos metros más adelante. Finalmente son Juanan, Lopa, Alan, Alex y Palma los más atrevidos.
Tardan mucho, demasiado para no haber ocurrido nada. Al poco aparece Palma, Alex ha pinchado y toca reparación. Una vez reunidos de nuevo y soportadas las correspondientes chanzas tomando como objetivo al protagonista del pinchazo, tres kilómetros de dura subida nos esperan antes de llegar al área recreativa, la Casa Del Guarda, donde tendrá lugar el hamaiketako. No hemos hablado de las eléctricas, las ebikes, aquí es cuando se echan de menos y envidiamos nada sanamente a Iñaki, Igor, Palma y Vero. Yo el que más.
El hamaiketako otra vez más, seña de identidad de nuestro grupo. Da igual quienes sean los participantes nunca desmerece al anterior. Quizás en esta ocasión hayamos andado algo cortos de vino, aunque los tragos que echamos de la bota que Alan había... ¿¿¿ olvidado??? cuando llegamos de regreso al parking de Trapaga, no tienen precio. Je, je, je, je...
Anchoas caseras, ibéricos diversos, piparras en abundancia, queso, palmeras de coco y chocolate, cava, bombones, pan,... (seguro que me dejo algo). Casi mejor no ir de jamada después...
40 minutos después reanudamos la marcha, no sin antes haber recuperado la navaja de Igor que iba camino de la basura con las prisas de recoger. Vero en este momento debe regresar y se despide de todos nosotros dejándonos en manos de Juanan que está demostrando ser, además de un tipo genial, un estupendo guía. Nos propone acercarnos al monte Ganguren y no dudamos en aceptar. Creo que todos pensamos... "su puta madre". Casi kilómetro y medio de subida técnica, pedregosa, dura,... que mereció absolutamente la pena cuando llegamos a la cima y nos recreamos con las vistas que ofrece desde allí el mencionado Monte Ganguren. ¿O era el Monte Banderas? Me quedó la duda al final. Marqués!!!!!!! ¿Era este o era otro? jajajajaja
Alan lleva todo el día dejándola botando para todo aquel que quiera meterse un poco con él. Por supuesto el que más atento está siempre es Lopa, que no tiene piedad. Después de la correspondiente foto regresamos sobre nuestros pasos para iniciar ya la bajada definitiva que nos dejará en el lavadero de bizis de Zamudio. 4 kilómetros de bajada difícil, técnica, incómoda (para mí) protagoniza la última dificultad del día.
Procedemos a lavar las bizis y Juanan se despide, no sin antes agradecerle todos el trato exquisito y la promesa de volvernos a juntar. Nos indica claramente como volver a los coches pero se pone Lopa de guía y se pierde la mitad de la cuadrilla. ¿A quien se le ocurre seguir a Lopa? jajajajajaja Los que seguimos a Kike llegamos enseguida al parking y esperamos un ratito a que llegue el resto.
Después de observar como Aitor no encuentra las llaves del porta (aquí hay para todos) nos despedimos encantados de haber conocido un nuevo biker que también debió encontrar algún que otro billete de 50 euros, ¿eh Txosan?
En El Valle nos despedimos el resto. Agradecemos enormemente la aportación de Palma materializada en su furgoneta que hace que sea mucho más cómodo para todos la participación en estas kdadas.
Agradeciendo a todo el personal su buena disposición y después de haber dado buena cuenta de la bota de Alan nos despedimos hasta la próxima que promete ser el mes que viene. Gracias!!!!!!!!