sábado, 29 de abril de 2017

VÍA VERDE DE LA SIERRA DE LA DEMANDA

          Hace ya unos pocos años Jorge le enseñó a Isma un paseo espectacular por una Vía Verde cerca de Burgos. Desde entonces hasta en tres ocasiones más ha vuelto a realizar el recorrido, no pudiendo acudir yo en ninguna de ellas. En la tercera Paco tiene la oportunidad de ir y eso no hace más que aumenten mis ganas de conocer dicha Vía. Por fín, a finales de marzo principios de abril... Isma propone otra vez excursión a la Vía Verde dela Sierra de la Demanda. Y aunque en principio tenía cita de baile con Arrate en Santander, finalmente se celebra en domingo con lo que el 29 de abril seremos 4 los participantes en la ruta. Jorge, el guía y anfitrión, Isma, que nos llevará hasta allí y Paco y yo.

          Varias veces durante el mes de abril , cuando hablamos de la excursión, Isma me dice que me voy a aburrir. Entiendo que se refiere al aspecto del esfuerzo físico porque si no, no se explica. Un paseo en bizi con semejante compañía y por una Vía Verde totalmente desconocida para mí, ... ¿aburrirme? jajajajajaja

En la antigua y abandonada estación de Sky Valle del Sol
RELIVE                                                                                                              ENLACE AL TRACK
          El punto de inicio de la ruta es en Arlanzón, a unos 25 km de Burgos. Ello implica un madrugón importante para poder hacer un recorrido "que merezca la pena" a nuestro ritmo tranquilo y a tiempo de llegar a comer unas estupendísimas alubias, que mira tú por donde, son referencia en la zona, las alubias de Ibeas de Juarros. A las 6.45 horas quedamos Isma y yo para montar portabicis y a las 7.00 con Paco para cargar la suya y emprender la marcha. 

          Cumplimos sobradamente los horarios previstos lo que nos permite quedar con Jorge en Ibeas para tomar un café antes de dirigirnos a Arlanzón, donde descargaremos las bizis y daremos comienzo la ruta. Nos encontramos con nuestro anfitrión y su sempiterna sonrisa. Mucho, demasiado tiempo sin vernos... parece que no pasan los años por él. 

           Tras tomar el café nos dirigimos al pueblo donde comienza la Vía Verde y tras todos los preparativos para comenzar aún no son las 9.30 horas cuando iniciamos el pedaleo, hora prevista por Jorge para la salida. 
Poniendo a punto el Alpify

Sin gafas no veo una mierda, no se qué miro

Preparados para partir
          No tengo demasiada experiencia en pedalear por Vías Verdes si exceptuamos la de los Montes de Hierro en Bizkaia, así que me llama poderosamente la atención lo pronto que estamos en medio de la nada. Si exceptuamos las instalaciones de una depuradora en pleno trayecto de la Vía Verde, debemos dar un pequeño rodeo para circunvalarla, a unos 800 metros de la salida, no hay ningún indicio de "civilización" hasta llegar a Pineda de la Sierra. 

          Jorge nos ha contado el plan para hoy con puyita incluída dirigida a mí. Recorreremos 21 kilómetros por la Vía Verde hasta llegar a las inmediaciones de Pineda, una vez allí abandonaremos dicha Vía para dirigirnos por una tendida pendiente hacia una antigua estación de sky, conocida como "Valle del Sol". De allí volveremos a la Vía Verde pero un poco más adelante de donde la dejamos y recorreremos 6 km más hasta llegar al puerto del Manquillo; una subida ésta, durísima, que junto a un firme de grijo y piedra suelta dificultan en grado extremo poder ascenderla. De hecho, y aquí viene la puyita, Jorge me dice que nunca lo ha conseguido (viene una vez a la semana, casi durante todo el año), que Isma lo había intentado pero no lo había conseguido (hace tiempo que no está a tope) pero que yo sí la subía. ¡como me conocen! Jorge me ha puesto el capote y entraré hasta el fondo... me conozco.

          El día ha amanecido gris. Toda la semana hemos estado pendientes de la previsión meteorológica, malísima. De hecho Jorge insinuó la posibilidad de aplazar la ruta para otro día con perspectivas más halagüeñas. Afortunadamente salió Isma raudo para disipar dudas... ¡que somos de Bilbao! No parece que vaya a llover. A ver como evoluciona el día.
Apenas empezado el recorrido nos encontramos en medio de la nada

Jorge, Isma y Paco

Pedalear tranquilo, charleta agradable
          Tres cuartos de hora de pedaleo y llegamos al kilómetro 10 donde nos encontramos la primera "sorpresa desagradable" del día en forma de cuestón, apenas 100 metros de longitud pero duros, muy duros. El hundimiento de un túnel y el alto coste de su restauración logra en la mayor parte de los casos esta solución en forma de "by-pass", mucho más económica. 

          Es increíble como el yayo de este grupo sube todo el repecho de pié, pedaleando sin descanso. Dudo que yo fuese capaza de hacerlo. Es como el buen vino, mejora con los años. No creo yo que hace 20 años cuando dimos nuestras primeras pedaladas juntos estuviese en mejor forma que ahora. Después de recuperar el resuello en lo alto seguimos nuestro camino rodeado de árboles. Jorge recuerda que en alguna ocasión ha visto corzos. Paco ve orquídeas silvestres. 

Primer by-pass para salvar el hundimiento de un túnel

La cuesta se las trae, cada uno fiel a su estilo...

Apenas 80 metros de longitud... y para abajo

También aquí se notan los recortes
          Una de las cosas de las que más disfruto cuando hago una ruta por primera vez y además con guía es que éste me explique historias relacionadas con el lugar en que nos encontramos. Así que después de "presionar" un poco a Jorge nos explica que esta vía verde es el resultado del abandono de un ferrocarril minero que se construyó allá por el año 1900 para intentar abaratar el coste del trasporte hasta Burgos del mineral de hierro que se extraía en los alrededores de Monterrubio de la Demanda, punto final de la Vía Verde en su totalidad. Nos queda pendiente para una futura ocasión. 

          Al parecer fué un auténtico desastre porque la linea no estuvo en uso más allá de 6 años. Lo caro que resultaba el transporte desde Burgos hasta Bilbao, donde se encontraba la siderurgia, fue la razón principal para su abandono. Llegó a tener licencia para el transporte de viajeros pero nunca fue utilizada para ofrecer tal servicio. 54 km de longitud total que fueron recuperados sobre 2004 para uso y disfrute de jinetes, viandantes y ciclistas. Actualmente se intenta recuperar el proyecto para unir esta Vía con la que discurre por Atapuerca, su yacimiento como ya sabemos fue descubierto como consecuencia de las obras de un nuevo trazado ferroviario.

           Uno de los grandes atractivos de esta ruta es el tránsito desde el kilómetro 13, más o menos, junto al embalse del Arlanzón. Durante 4 km dejaremos a nuestra izquierda dicha reserva acuífera con el disfrute visual que ello conlleva. Nos vamos cambiando de pareja. A pesar de no encontrarnos con nadie, el ritmo que llevamos debido a la poca dificultad del trazado hace que la conversación a cuatro no sea fácil (estoy como una tapia), es por ello que nos vamos alternando y charlando uno con otro.
A nuestra izquierda el embalse de Arlanzón

¡que sí, estate tranquilo! En el postre lo hablamos...

Único desprendimiento importante en toda la ruta

El entorno es indescriptible

Poquísimos bikers.... ¡daban malísimo!

Ojo al suelo de madera con temperaturas bajas
Descanso no previsto

El móvil suena en cualquier momento
Reanudamos el pedaleo
          Y llegamos al km 21 y al momento en que abandonamos, de momento, la Vía Verde. Las ocasiones en las que Isma ha estado aquí esta parte del recorrido no la ha realizado. Nunca se ha sentido lo suficientemente fuerte. Esta vez Jorge no ha dado opción y nos toca ascender unos 250 m de desnivel en unos 5 km. Aquí cada uno a su ritmo, yo voy a subir al mío, nos suelta Jorge. Y enseguida, con un pedaleo más ágil que el nuestro toma la iniciativa y comanda la expedición. Hasta en tres ocasiones se detendrá a esperarnos y a preguntarnos ansiosamente... ¿que, os gusta? ¿ a que es chulo? Le entiendo perfectamente, cuando pedaleo por los Montes de Hierro de La Arboleda y hago de guía a bikers que no conocen la zona ,las ganas de que les guste el recorrido, el paiseje, ... son inmensas. Deseas que les guste tanto como te gusta a tí. Y cuando en su mirada no ves lo que quieres ver, pienso... No está hecha la miel para la boca del asno. Jajajajajajaja

Pineda de la Sierra a la izquierda

Jorge necesita ir más rápido

Poliki, poliki, ...
          Poco a poco Pineda queda atrás. Cruzamos una barrera que impide el paso de vehículos a cuatro ruedas y con un pedalear muy, muy tranquilo vamos avanzando y recortando la distancia que nos queda para llegar al Valle del Sol. Un hayedo espectacular surcado por un marcado arroyo me recuerda la bajada desde el Anboto hacia Besaide. Quizás sin la inmensidad de aquel pero precioso.

          Cuando la pista se inclina hacia arriba todos sufrimos en exceso. Algunos más que otros. A unos les pesan los años, a otros los kilos, a otros la inactividad, ... pero lo que no deja lugar a la duda es que si hay que subir... se sube. Cuando lleguemos arriba vamos a llevar alrededor de las 2 horas y media de pedaleo. Hay que alimentarse... Isma y Jorge han aprovechado a comer algo en la parada realizada por la llamada de teléfono, y llevábamos una hora rodando. 
Hayedos a nuestra izquierda

Extasiados en medio de la nada

Observando el camino recorrido

¿tan arriba?

¡barro!
          Nuestro guía particular nos sigue "ilustrando" sobre la zona. Hace poco un bttero bastante más joven que él le alcanzó y se puso a darle conversación.... Voy a hacer La Integral. Y resulta que esa Integral comprende la ascensión a las tres cimas más importantes del lugar, El Mencilla, San Millán y Trigaza. Un reto de palabras mayores que evidentemente Jorge no estaba dispuesto a afrontar. Yo me quedo con la copla y apunto en mi memoria: La Integral (Mencilla, San Millán y Trigaza), ¿quien sabe? quizás algún día...
Aquellos son dos de los montes más altos de la zona

San Millán a la derecha (sobre la cabeza de Isma) y Trigaza a la izquierda

Ya no falta demasiado para alcanzar la cota más alta de la jornada
         Estamos a punto de alcanzar la cota más alta del día. Los paisajes se van abriendo. El estado impecable del firme de la pista se ve empañado por un tramo de unos 200 metros bastante estropeados pero que no suponen dificultad tal que impida el pedaleo. Casi sin darnos cuenta llegamos a la antigua estación de Sky, hoy reconvertida en albergue para jóvenes. Unas fotografías rápidas. Comentarios sobre lo extraño que nos parece la construcción de una estación de Sky de una única pista. Quizás sea ese el motivo de su cierre. Nos alimentamos, nos abrigamos para la bajada rapidísima por asfalto viejo y abandonado. Jorge nos llega a ofrecer hasta tres opciones de descenso pero todos coincidimos en mantener el plan inicial que nos llevará a las inmediaciones de Pineda, donde retomaremos la Vía Verde camino del Manquillo. 
En esa cresta pero más a la derecha se halla la tercera cumbre más alta de la zona, El Mencilla

Único trecho de la ruta que nos encontramos firme en mal estado

Antigua estación de Sky de Valle del Sol
A empeño y pundonor no hay quien le gane

Jorge nos explica las diferentes opciones para continuar

Vamos que se nos hace tarde...

Descenso vertiginoso por carretera abandonada

Pineda de la Sierra al fondo
          6 km nos separan del Manquillo ahora que ya nos encontramos en la Vía. Aquí el trazado de la vía coincide casi en su totalidad con el curso del río Arlanzón, al principio por nuestra izquierda para poco después pasarlo y continuar por nuestra derecha. Casi sin darnos cuenta y ensimismado por la charla de Jorge vamos avivando el ritmo... Paco e Isma se quedan atrás. De repente... ¡un ruido! ¡unas ramas que se mueven a nuestra izquierda! ¡algo parecido a un Corzo corre monte a través en nuestra misma dirección. Me paro, lo que hace que Jorge se detenga y esperamos a los de atrás para ver si tienen la misma suerte que nosotros y pueden ver el animal. ¡que va! ¡a saber donde para! Seguramente habrá cruzado la carretera que asciende al puerto del Manquillo para perderse en la espesura del monte.
Retomamos la Vía Verde

Nos dirigimos al Manquillo

Altar de campaña junto al Arlanzón

Cruzando sobre el río Arlanzón
          Apenas un par de kilómetros para el final y Jorge me sugiere que regule, que afloje, que coja fuerzas... Ahí está. Tres repechos, el último el más duro. Sin descanso entre el segundo y el tercero. Gravilla y piedra suelta que te harán perder la tracción. La información de primera mano de Jorge es breve y concreta.

          Al final del segundo repecho quiero regular para coger aire y descansar, lo que provoca que mi rueda delantera se hunda en la gravilla, se gire y me obligue a poner pie a tierra. ¡Que rabia! ¡que torpe! Raudo vuelvo a dejarme caer hasta el incio del repecho con la idea de que si no puedo que sea por el esfuerzo, por imposibilidad. No por una torpeza. Nuevo intento. Apenas 20 metros más. Me quedo sin aire. Se me sale el corazón por la boca. Decido parar. Estoy varios minutos recuperando el aliento. Demasiado tiempo sin realizar un esfuerzo tan intenso. Isma, tan flojito que estaba él llega, creo recordar, hasta donde he llegado yo. En cuanto se ponga en forma... lo subirá sin problema. Parece mentira lo aparentemente fácil que se le ve subir en su flamante Orbea nueva de doble plato. Ver para creer. Paco y Jorge no entran al trapo en estos desafíos más propios para Pérezdelpecho que para otra cosa.
Ya de regreso y cuesta abajo Jorge demuestra que el fue antes que Valentino

Cruce de Pineda de la Sierra

Curioseando información

Punto más alto del recorrido, El Manquillo, 1451 mts
          Ahora es más fácil. Hemos comenzado el regreso y la gravedad juega a nuestro favor. En menos que canta un gallo nos plantamos en el cruce con la carretera de Pineda, donde Jorge nos enseña y comentamos los paneles informativos sobre la Vía Verde y seguido llegamos a Pineda. Momento éste que aprovecharemos para tomar un cafecito, sentar nuestras posaderas en "cómodas" sillas de bar y comentar tranquilamente sobre lo vivido hasta ahora. 

          Los muchos años que lleva Jorge realizando este recorrido hace que conozca a la gente del lugar. En el bar en el que descansamos hay hasta uno de los "únicos" calendarios que desde hace tiempo lleva realizando. Una foto por cada mes. Con la inexcusable condición de que la foto ha de estar tomada en una ruta realizada en bici. Un hobby, una ilusión admirable y hermosa.

          Nuestro guía tiene controlados los tiempos perfectamente en función de cada uno de los ritmos posibles. Las alubias nos esperan. Hay margen suficiente pero conviene no entretenerse demasiado por lo que tampoco nos recreamos demasiado en nuestro descanso y reanudamos la marcha. 

Iglesia románica de San Esteban Protomartir,  de Pineda de la Sierra

El esfuerzo se hace notar

¿que os decía? Paco también estirando

Posando


Dando buena cuenta del tentenpié a mitad de recorrido
          21 km nos separan de nuestro destino, de nuestro inicio. Cuesta abajo fundamentalmente. Una distancia que en condiciones normales no debería llevarnos mucho más de 45 minutos. La realidad es que vamos muy justitos ya. En el caso de Isma con dolor de patas y culo desde hace tiempo... ¡como para no! Creo que es su cuarta salida desde primeros de año, quizás la quinta... Yo no sería capaz. 

          Hacemos camino rápido. Cambiamos nuestras bicis en algún momento. Isma con Paco para que éste compruebe las maravillas de la doble y 29". Claro que con la altura de sillín no va todo lo cómodo que debería. Al de un rato y debido a esto Isma nota algo estraño en el pedalear de la bici de Paco, con el resultado de que cambiamos Paco y yo. El sillín de mi bici está aún más alto que la de Isma lo que para Paco resulta una auténtica tortura, así que volvemos a nuestra bicis rápidamente. No observo nada raro en la bici de Paco.
Jorge parece que tiene hambre, aprieta

Ermita del Santísimo Cristo

Cuesta sacudir la pereza

Pero con esa sonrisa siempre es más fácil

Primer encuentro con ganado ovino

Segundo encuentro

El traqueteo sobre las tablas de madera es ensordecedor

         Las previsiones eran tan malas que estamos recibiendo un verdadero regalo en forma de buen tiempo. Pocos, poquísimos txirrindularis es una de las consecuencias de esas predicciones. Charlando con Isma distraído llega un momento en que con plato delantero grande pongo la corona más alta y se me bloquea el pedaleo... llevo la cadena demasiado corta, debo poner remedio. Alcanzo a Jorge e Isma que ruedan en agradable charla y les rebaso para acompañar a Paco que a su ritmo ha ido haciendo camino. Pedalea en busca de las orquídeas que ha visto esta mañana. Búsqueda infructuosa. 

          
Esto en verano tiene que estar concurrido

A estos no les vimos antes

No se cansa uno nunca de contemplar el paisaje

Justo aquí cruzo cadena y debo parar
          Como comentábamos al final del recorrido llegamos a un punto en que sentimos alivio por la finalización del mismo y al mismo tiempo lástima por poner punto final a un paseo tan agradable. Curiosamente siempre es así. 

          Llegamos a los coches y casi de la misma Jorge nos comenta que se adelanta, que así va duchándose él primero. Nosotros nos entretendremos un poco más montando el portabicis y las bicicletas. ¡Un poco más! Eso habría querido yo. Mi exagerada obsesión por la perfección hace que me líe con la colocación de las bicis. Que haga lo que haga no me quede conforme. No está a mi gusto. Paco propone quitar un sillín y me agarro a esa salida como a un clavo ardiendo. Jorge nos llama... Se extraña por nuestra tardanza. ¡Ofuscación!
Las bicis a buen recaudo

Alubiada final para dar por terminada una gran jornada de bizi
          Después de una reparadora ducha...¿que mejor para poner punto y final a la ruta que una estupendísima alubiada? Esta forma de acabar las rutas aporta un plus al estupendo día de bizi que hemos tenido. Otro lugar nuevo conocido. Para repetir. Además hacía ya demasiado tiempo que no compartía ruta con Isma y Paco. Con Jorge ni que decir claro, aún tenía la Rocryder del Decathlon cuando dimos aquel paseo en Noja. Tenemos en las Vías Verdes un filón para seguir compartiendo pedaladas. Mientras me guardo en la memoria la de hoy. ¿Se animarán mis compañeros de BTTANDO a realizar esta martxa en otra ocasión?